BREVE
RESEÑA DEL DESCUBRIMIENTO DE AMÉRICA O EL ENCUENTRO DE DOS MUNDOS
Por: Nabonazar Cogollo Ayala
La
historia de Cristóbal Colón es la de un luchador incansable, estudioso y amante
de la astronomía, la cosmografía y la náutica a quien nos encontramos en el
siglo XV en la biblioteca del palacio real de Lisboa, Portugal, devorando
cuanto libro llegaba a sus manos sobre un tema que lo apasionaba: la tierra. Se
ignora a ciencia cierta quién era y en qué país europeo habría nacido, uno de
sus hijos, don Hernando Colón, aportó los únicos datos biográficos que sobre él
existen. Dice que había nacido en la república de Génova, Italia, el 31 de
octubre de 1451 y que había asistido a la Universidad de Pavía (Italia), de
esto último no hay evidencias. Estando en Portugal llegó a sus manos un
documento científico de la época preparado por el sabio italiano Paolo Toscanelli
en el cual se hablaba de la redondez de la tierra. Colón lo estudió con avidez
y se decidió a demostrar que tal tesis era cierta. Le llevó al rey de Portugal
de entonces, Joao II de la Casa Real de Braganza, quien desestimó el
proyecto por considerarlo improbable, costoso y peligroso. Colón entonces huyó
de la Corte Real Portuguesa con su pequeño hijo, Diego, vestido de fraile
franciscano. En 1485 se dirigió a Castilla, donde no fue fácil lograr que la
reina castellana, Isabel de la Casa Real de Trastámara, le diera una audiencia.
Apoyándose en el confesor de la reina, fray Hernando de Talavera, lo logró
finalmente, Isabel la católica escuchó sus planes y decidió apoyarlos. Colón
firmó con los reyes de Castilla y Aragón, respectivamente las famosas Capitulaciones
de Santa Fe, documento legal en el que se establecían las condiciones del
reparto de tierras y riquezas en las futuras tierras a descubrir navegando
hacia el occidente. Colón salió del Puerto de Palos de la Frontera el 3
de agosto de 1492, no sin antes solucionar muchos problemas que los enemigos
del proyecto colombino le opusieron. Los porteños lo juzgaban un marinero loco
que se lanzaría a la aventura hacia el mar tenebroso donde se creía que
habitaban toda clase de monstruos marinos. Haciendo uso de un poder real que le
concedieron los reyes había logrado conseguir tres embarcaciones, dos
embargadas y una alquilada. Para
reclutar marineros le tocó recurrir a los presos de la cárcel, porque ningún
marinero en su sano juicio quería formar parte de la tripulación de Colón. En
alta mar tuvo que sortear un motín de los reclutados quienes exigían el
inmediato regreso a España, finalmente al amanecer del 12 de octubre de 1492 la
flotilla arribaría a una isla en el mar caribe que la tradición ha denominado
Guanahaní, en lengua de los indígenas taínos.
Un marinero, Rodrigo de Triana, fue el primero en gritar… ¡Tierra!
Hoy se sabe que llegó al archipiélago de las Bahamas, pero se ignora a cuál de
las tantas islas de ese lugar pudieron haber llegado Colón y sus hombres. Los indígenas taínos se asombraron de ver
aquellos hombres tan extraños a quienes llamaron “los hombres del cielo”.
De vuelta a España Colón fue recibido como un héroe y los reyes le prepararon
un recibimiento público especial en Barcelona, la capital condal. Colón dirigió
otros tres viajes más, entre los años 1493 y 1502. El cuarto y último fue un
total desastre, perdió sus barcos debido a un extraño caracol panameño que les
agujereó el casco y todos se hundieron, quedó entonces abandonado con sus
hombres en las costas de Puerto Rico durante un año y los alimentaron los
indígenas y cuando finalmente logró regresar a España, les cobraron el pasaje
de regreso, como si se tratara de cualquier persona. Fallecida Isabel de
Castilla, los herederos, Juana la Loca y su esposo Felipe el Hermoso, no lo
siguieron apoyando. Colón murió exigiendo el cumplimento de las Capitulaciones
de Santa Fe que le daban el 5% de todo el oro, plata y piedras preciosas
que se sacaran de las Indias, nunca le fue reconocido dicho porcentaje. Murió
en Valladolid, el 20 de mayo de 1506. Nuestro país abandonó el nombre de Nueva
Granada en 1863 y adoptó el nombre de Colombia para rendirle homenaje a
este hombre incansable y batallador. Colombiano quiere decir “hijo de
Colón”. Nuestro himno patrio dice: Se baña en sangre de héroes / la
tierra de Colón /. Pero este gran principio / el rey no es soberano/ resuena y
los que sufren / bendicen su pasión/.
Madrid (Cundinamarca, julio 22 de 2024